En esta guía se proporciona una secuencia de acciones que simplificarán al máximo tu tarea de eliminar al primer jefe (jefes, ya que habrá un total de 3 Demonios) en el complemento Dark Souls 3: The Ringed City — Demonio en agonía, Demonio de las profundidades y Demonio-Príncipe. Al igual que en el caso de la mayoría de los jefes, esta batalla consiste en dos etapas. En la primera etapa lucharás simultáneamente contra el Demonio en agonía y el Demonio de las profundidades, y después de destruirlos aparecerá otro oponente: el Demonio-Príncipe.
Cómo derrotar al Demonio en agonía y al Demonio de las profundidades
Esta batalla se desarrolla en dos etapas, y en la primera te enfrentas simultáneamente a dos oponentes alados. Si llevas contigo a un compañero de IA o recurres a la ayuda de otros jugadores, ellos podrán unirse a la batalla aproximadamente en 20 segundos, ya que antes de llegar a la arena, tendrán que ver una secuencia de video con una larga caída.
Si quieres esperar a tus compañeros, intenta ganar tiempo corriendo un par de vueltas alrededor de los Demonios, tratando de no recibir daño. El factor clave para ganar la batalla será la cantidad de daño que inflijas, ya que los oponentes tienen un alto nivel de HP. Un arma adecuada sería la que inflija daño mágico, como la Espada de la Justicia y la Gran Guadaña de Friede, ya que todos los oponentes son vulnerables a la oscuridad y a la magia. ¡Prepárate para una batalla prolongada!
En mi lucha contra los demonios, uno apareció en un estado de agonía a mi izquierda, envuelto en llamas. El otro, proveniente de las profundidades, era más difícil de detectar, ya que se encontraba en un fondo oscuro a mi derecha. Ambos enemigos poseían ataques similares, con algunos golpes más poderosos que los jugadores experimentados de la saga podrían esquivar con facilidad.
A menudo, los jefes utilizan una serie de ataques rápidos con un golpe final al suelo que es crucial esquivar.
Cuando los demonios están envueltos en llamas, sus estadísticas aumentan considerablemente. Sin embargo, al usar un poderoso ataque con las patas al suelo, se liberan de las llamas, volviéndose vulnerables durante un tiempo considerable. En este estado, a menudo utilizan una niebla tóxica que reduce rápidamente mi salud. Por eso es importante estar atento a la ubicación de ambos enemigos durante toda la batalla. Los demonios pueden estar tanto simultáneamente en estado de llamas o normal, como por separado. Si un demonio no está en llamas, intenta mantener una distancia máxima, mientras que el demonio en llamas se acerca rápidamente al héroe principal.
Mantenerse cerca de los demonios sin llamas y utilizar ataques cuerpo a cuerpo es la mejor opción, especialmente si tienes un compañero experimentado que pueda esquivar para estar detrás del enemigo.
Sin duda, para facilitar la batalla, será más sencillo concentrarse primero en uno de los Demonios.
Cuando ambos Demonios caigan, el último de ellos será resucitado y se transformará en el Demonio Príncipe. Los ataques del enemigo cuerpo a cuerpo permanecerán casi iguales que antes. Pero hay un pero: desde este momento y hasta el final de la batalla, el Demonio Príncipe estará en un estado de fuego, fortalecido. Es un oponente mucho más agresivo, por lo que tendrás que buscar el momento adecuado para tus propios ataques con cuidado.
También aparecerán nuevas ataques. En primer lugar, el jefe invoca bolas de fuego que funcionan como torretas. Es difícil evadir sus proyectiles. En segundo lugar, el Demonio se eleva en el aire y luego se precipita hacia abajo con toda su velocidad, intentando embestir al personaje principal, o lanzando una bola de fuego gigante con daño AoE. En tercer lugar, disparará rayos de fuego a lo largo del suelo, lanzándolos exclusivamente frente a él. Es fácil esquivar estos ataques, además permitirán que realices varios golpes rápidos al Demonio.
Finalmente, el Demonio Príncipe puede invocar piedras caídas, mientras permanece en su lugar. Es difícil evadirlas, pero tendrás unos segundos para atacar al Demonio si logras acercarte a él. No olvides que después de caer, después de unos segundos, las piedras explotarán.
Todos los Demonios serán derrotados después de infligir suficiente daño y un ataque crítico en la cabeza.
Una alta resistencia a los ataques de fuego te ayudará a sobrevivir en la batalla. La mejor opción sería utilizar guerreros de clase tanque con mucha vida.
Te serán útiles objetos como el Escudo del Caballero Negro, el Escudo del Dragón y el Escudo Negro. Dado que la mayoría de los ataques cuerpo a cuerpo se pueden prever por una animación bastante temprana, la alta movilidad del personaje también será una ventaja en el combate. Sin embargo, el factor clave, como se mencionó anteriormente, es el tamaño de tu daño. Por lo tanto, lleva contigo el arma más poderosa y no descuides la ayuda de los PNJ o amigos si es posible.